La alianza de McLaren y Toyota

Ayer el piloto Hamilton batió el record de precocidad de Fernando Alonso como campeón del mundo de formula uno. Lamentablemente no el es único record que ha sido arrebatado esta temporada a nuestro campeón español, ya que Vettel también consiguió ser el piloto más joven en ganar un gran premio de fórmula uno.

Quizás la victoria de Vettel en un gran premio era un record que se esperaba fuera superado antes o después, puesto que las peculiaridades de un gran premio pasado por lluvia, o la suerte de un coche de seguridad podría jugar a favor de un joven piloto que superara al joven Alonso en conseguir un podio. El caso Vettel esta temporada ha sido espectacular ya que ha conseguido muy buenos registros esta temporada y las mejores escuderías apuntan hacia él para un futuro no muy lejano. Sin duda se trata de un piloto a tener muy en cuenta y que próximamente dará muchas alegrías y espectáculo en el circo de la formula uno.

Es en este circo en el que Hamilton ha conseguido consagrarse esta temporada como el rey león por delante del resto de aspirantes. Así, el nuevo joven rey león ha conseguido superar en juventud a nuestro Fernando Alonso, cayendo así un segundo record esta temporada en manos de las jóvenes promesas que están llegando a la parrilla o en este caso de un ya consagrado Lewis Hamilton.

Sin embargo, Hamilton estuvo a punto de convertirse en el pupas de la fórmula uno cuando a falta de dos vueltas para acabar el Gran Premio de Brasil Vettel le superó dejándolo en una inútil sexta posición que le hacía no solo perder el título sino dejarlo en ridículo delante de todo el mundo. Sería la segunda temporada consecutiva que el piloto de McLaren al que tanto ha mimado su escudería desde su llegada a la fórmula uno y al han permitido pilotar al límite de la legalidad desde entonces perdería el título en la última prueba de la temporada.

Sebastian Vettel aguantó los envites del aspirante a campeón con su Red Bull ante el poderoso McLaren que las estaba pasando canutas y que estuvo todo el premio jugando al filo de la navaja. Buen trabajo del alemán sin duda, que con motor Ferrari daba el triunfo a Felipe Massa en su tierra. El brasileño entraba como nuevo campeón del mundo con la bandera de cuadros ya que el británico se encontraba a sexto. Ferrari celebraba el ansiado título, los ingenieros se abrazaban, Massa se levantaba los brazos sintiéndose campeón y la grada llegaba al éxtasis ante la hazaña conseguida que daban una probabilidad de éxito del 8% en los pronósticos.

Lo que nadie esperaba en aquel momento era la participación de Timo Glock en este ajustado final en el que el piloto de Toyota con neumáticos de seco no fue capaz de aguantar a Hamilton que lo pasó en la última frenada como si de un doblado se tratara. Ante tan fácil adelantamiento, los comentarios por el padock no dejan de circular señalando al alemán como aliado de McLaren en la conquista del título.

Parece ser que ante la poca popularidad de Hamilton entre los pilotos por su soberbia y sus maniobras algo arriesgadas que hacen incluso peligrar la seguridad del resto de pilotos, se vio a los miembros del equipo McLaren intentado hacer aliados por Interlagos entre el resto de equipos. ¿Habría acaso conseguido su objetivo el equipo britanico con los japoneses? Esto es algo que nunca se sabrá y que con los años caerá en el olvido.